HASTA LUEGO

Mi nombre es Jorge Armando García y tengo miedo.

Todo comenzó ayer, cuando ella dio media vuelta y se fue. Y yo di media vuelta y me alejé. Me alejé como quien no quiere alejarse, despacio, midiendo cada paso, sin voltear la mirada.

Caminé por media hora antes de decidir irme a casa. Caminé con los ojos húmedos, más húmedos por momentos, escuchando canciones que significan mucho y recordando que esos mismos lugares que pisaba solo antes los pisaba a su lado, atado de su mano, contándole chistes malos que ella celebraba, mirándola a los ojos como sólo lo hice con ella.

Mirándola a los ojos y viéndome en ellos de rato en rato.

Caminé y las personas me miraban. Yo evitaba esas miradas y cambiaba las canciones a la mitad, antes de que por fin se desatara el llanto.

Entre a un baño, enjuagué mis ojos y vi de frente a las personas. Salí escuchando otro tipo de canciones, buscando aquellas que no significaran nada... No encontré ninguna.

Salí a la calle, la ciudad mal iluminada me sorprendió y eso me dio miedo, casi siempre me da miedo mirar atrás, los cambios, las derrotas.

Y me subí a un carro rumbo a casa. Miré por las ventanas a las parejas caminar felices como antes lo hacíamos nosotros, vi besos en las esquinas, abrazos en los paraderos, tomadas de mano en las caminatas.

Y me di cuenta que ya no estabas.

Porque no estabas desde que diste media vuelta como en la canción de Calamaro, porque lo que los hombres escriben siempre se vuelve a repetir, porque la vida es así y siempre nos caemos a pesar de todo, porque tú te diste la vuelta mucho antes que anoche y yo no lo sabía.




Porque te diste la vuelta pero ya no estabas desde mucho antes.




Mirando por la ventana del carro descubrí muchas cosas, descubrí algunos misterios que rodearon estos meses, descubrí la manera en que nos quisimos mientras todo fue bueno. Te descubrí como en esa noche de mi cumpleaños.

Y cuando sonó una canción llamada No me imagino todo cambió. Quizás fue porque esa canción significa mucho más que las otras, tal vez fue porque la escuché cuatro veces, o quizás porque con esa canción me enamoré de ti hace ya algún tiempo.

Y recordé cuando antes escuchaba esa canción y te llamaba diciéndote que te quería, o te mandaba mensajitos diciéndote que esa canción me hacía recordarte, cuando te hacía promesas, te decía que te iba a esperar, que ya vería como ibas a ser mi enamorada, que yo lo presentía, y que todo iba a salir bien.

Esa canción me hizo llorar en el carro y no me importaron las demás personas.



Sé que aunque me quieres también quieres ser feliz
pero a mi lado eso es difícil porque yo soy así
ahora yo no puedo ayudarte ni tú a mí.
Sé que cuando vuelva seré extraño para ti
después de un tiempo sé que volverás a confiar en mí
pero esos días me parecerán sin fin.
No me imagino como podré estar sin ti.
No me imagino como podré estar sin ti...



Y alguien se acercó y me preguntó si me sentía bien. Y yo moví la cabeza diciéndole que no, y sequé mis lagrimas y llegue a casa.

En casa lloré libremente, expectoré todo lo que tenía dentro. Y lloré y me sentí bien después de unos minutos.

Después te llamé y te desee buenas noches.

Después colgué y me quedé en silencio.

Después vi nuestras fotos en mi teléfono.

Después me alegré por lo que alguna vez tuvimos.

Después te fuiste para siempre.

Y hoy estoy aquí por la tarde, quise escribir esto ayer pero necesitaba estar más tranquilo, necesitaba decir las mismas cosas pero con otras palabras, con estas palabras de cordialidad que siempre te merecerás.

Y ya me voy dentro de un ratito. Estoy leyendo a Benedetti y descansando cada dos páginas para escribir algo en un block de notas. Estoy siendo como debí ser siempre y eso está bien.

Gracias por todo, por ser mi media mitad, por nuestros momentos, por la amistad, por el amor, por la complicidad de nuestros ojos por la tarde. Gracias por dedicarme un tiempo para intentarlo.

Te quiero

.......................................
ayer

yo era como los créditos finales que nadie lee de las películas

llegaba demasiado tarde

cuando todos ya se habían ido

o cansado

y sin voluntad algunos me miraban sólo porque les daba flojera levantarse de su silla

aún así

de alguna manera tú me viste

tú me viste pero te fuiste

y yo me quedé vagando porque aún no quería que esa película se terminara

porque

odio cerrar páginas

cerrar películas

cerrar los ojos y comenzar desde cero

porque

no me gusta volver a sentir lo de hace 2 años

y sin embargo

cometo los mismos errores

y se termina la función y ya no queda nada que decir

hasta

que la pantalla se pone negra

y se encienden las luces

recién ahí

puedes verme mejor

pero ya es tarde

ya te fuiste con todos

como todos

a pisar otros cines

a ver películas más interesantes

a ir a cines con otras personas que te harán olvidarme

y eso

no tiene nada que ver con el amor

porque

eso no se acaba como las películas

porque

el que ya no esté no significa que yo no siga apareciendo de rato en rato

al final de las historias

porque

él que yo no esté no significa que tú no estás...







(y ahora me despido momentáneamente de este blog, no sé cuando vuelva a postear pero presiento que será dentro de mucho)